El Gobierno de Murcia ha anunciado una serie de medidas para flexibilizar las condiciones de acceso a las ayudas de la Política Agraria Común (PAC), resultando en un incremento significativo del 7% en las solicitudes de ecorregímenes. Estas modificaciones se han centrado principalmente en la reducción del tiempo que deben estar vivas las cubiertas vegetales y los días de pastoreo requeridos para acceder a estas ayudas.
Aumento en las Solicitudes de Ecorregímenes
Según datos proporcionados por la consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, «tras el cierre del plazo, hemos detectado un incremento en las solicitudes de ecorregímenes este año, con 500 agricultores y ganaderos más presentando la petición de estas ayudas en comparación con el año anterior». Este aumento no solo se refleja en el número de solicitudes, sino también en la superficie que se acogerá a estas prácticas ambientales, con un incremento del 2,7%.
Reducción del Tiempo de Cubiertas Vegetales
Una de las medidas clave ha sido la reducción del tiempo en el que deben mantenerse vivas las cubiertas vegetales. En 2023, los agricultores que deseaban acogerse a este ecorregimen tenían que mantener las cubiertas vivas durante cuatro meses. Sin embargo, este año el requisito se ha reducido a solo dos meses, específicamente en el periodo de febrero y marzo. Rubira comentó que «esta flexibilización parece haber animado las solicitudes».
Labores Superficiales Permitidas
Además, se permitirá realizar labores superficiales de mantenimiento de las cubiertas vegetales que no supongan una modificación de la estructura del suelo. Esta medida garantiza que el suelo no permanezca desnudo en ningún momento del año, manteniendo así la integridad ecológica necesaria.
Menos Días de Pastoreo
Otra medida adoptada ha sido la reducción del número de días de pastoreo necesarios para acogerse a los ecorregímenes. Se ha pasado de los 120 días obligatorios a 90, una reducción significativa que ha sido muy demandada por las organizaciones agrarias debido al descenso de pastos disponibles por la sequía. Rubira aclaró que «esta reducción ha sido muy demandada desde las organizaciones agrarias ante el descenso de pastos disponible por la sequía».
Adaptación a las Condiciones Agroclimáticas
Rubira concluyó indicando que estas medidas han adaptado en parte la Política Agraria Común a la situación agroclimática de la Región, pero también resaltó la necesidad de seguir demandando un ecorregimen específico que tenga en cuenta las necesidades agroclimáticas del secano árido de la Región.
Impacto en la Economía Agrícola Regional
El impacto de estas medidas se refleja no solo en el aumento de las solicitudes, sino también en la sostenibilidad y viabilidad de las explotaciones agrícolas y ganaderas de la región. Los 500 nuevos solicitantes representan una mejora significativa en la adopción de prácticas agrícolas sostenibles, lo que puede tener efectos positivos a largo plazo en la conservación del medio ambiente y la biodiversidad.
Beneficios para Agricultores y Ganaderos
La flexibilización de las condiciones no solo ha facilitado el acceso a las ayudas, sino que también ha proporcionado un alivio económico a los agricultores y ganaderos. Con menos requisitos que cumplir, estos profesionales pueden concentrar sus recursos y esfuerzos en mejorar la productividad y sostenibilidad de sus explotaciones.
Incremento de la Superficie Dedicada a Buenas Prácticas Ambientales
El aumento del 2,7% en la superficie que se acogerá a estas prácticas ambientales es un indicativo claro del compromiso de la comunidad agrícola con la sostenibilidad. Este incremento no solo beneficiará al medio ambiente, sino que también contribuirá a la resiliencia de las tierras agrícolas frente a los desafíos climáticos.
Desafíos Futuros y Recomendaciones
A pesar de estos avances, el Gobierno regional reconoce que quedan desafíos por delante. La consejera Rubira ha enfatizado la necesidad de seguir trabajando en un ecorregimen específico que tenga en cuenta las características únicas del secano árido de la Región. Este enfoque permitirá adaptar aún más las políticas agrarias a las realidades climáticas y agrícolas locales, garantizando que los agricultores y ganaderos puedan continuar operando de manera sostenible y rentable.
Necesidad de Políticas Adaptativas
La sequía y otras condiciones climáticas adversas seguirán siendo un desafío constante. Por lo tanto, es esencial que las políticas agrarias sean flexibles y adaptativas, permitiendo ajustes rápidos y efectivos para mitigar los efectos negativos sobre la producción agrícola.
Participación Activa de las Organizaciones Agrarias
Las organizaciones agrarias han jugado un papel crucial en la implementación de estas medidas. Su participación activa y continua será vital para asegurar que las políticas se alineen con las necesidades y realidades del sector agrícola. La colaboración entre el Gobierno regional y estas organizaciones es esencial para desarrollar soluciones prácticas y efectivas.
La flexibilización de las condiciones para acceder a las ayudas de la PAC ha demostrado ser una medida efectiva para incrementar la adopción de prácticas agrícolas sostenibles en la Región. Con un aumento del 7% en las solicitudes de ecorregímenes y un 2,7% más de superficie dedicada a estas prácticas, el Gobierno regional ha dado un paso importante hacia la sostenibilidad y la resiliencia del sector agrícola. Sin embargo, el camino hacia una agricultura plenamente adaptada a las condiciones climáticas locales requiere de esfuerzos continuos y colaboración entre todas las partes involucradas.
