El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente se ha reunido hoy, 28 de julio, con los representantes de las organizaciones agrarias representativas, ASAJA, UPA y COAG, para darles a conocer los pormenores del último paquete de medidas que la Comisión Europea ha planteado para tratar de aliviar la situación de crisis que soportan los ganaderos de vacuno de leche.
Dos son las líneas de ayudas propuestas por el Comisario de Agricultura, Phil Hogan, una primera destinada a la reducción de la producción que contaría con un presupuesto de 150 millones de euros para el conjunto de los Estados Miembros y una segunda dotada de 350 millones, de los que 14,6 corresponderían a España, que se destinaría, según ha expuesto el MAGRAMA, a aquellos ganaderos que se comprometan a tomar medidas para mejorar la liquidez, ajustar la producción y estabilizar el mercado, aunque esta medida cuenta con más plazo para su ejecución pues hasta el 30 de noviembre la Comisión Europea no aprobará los posibles beneficiarios.
«Precisamente el tiempo, asegura Roman Santalla, responsable de Ganadería de UPA, preocupa especialmente en la ayuda para la reducción de la producción, pues el 19 de septiembre las comunidades autónomas deben tener la relación de ganaderos interesados en la misma, para que el 20 de septiembre el Fondo Español de Garantía Agraria los traslade a Bruselas que contará con cinco días para cuantificar las propuestas y aprobarlas, con lo que el 25 de septiembre ya deberíamos saber quienes van a recibir estas ayudas y por cuantos litros».
Según se desprende de la información trasladada por el Ministerio de Agricultura, el importe por cada litro que se deje de producir será de 0,14 euros hasta un tope en la Unión Europea de 1,07 millones de toneladas. El precio es inalterable, pueden producirse prorrateos en el caso de que se superen esos litros, mientras que si no se llega a esa cifra en la primera apertura del periodo de abandono para octubre, noviembre y diciembre, se abriría un segundo plazo y así hasta completar esa cifra o llegar a cuatro periodos de abandono temporal e incentivado de la producción. La fórmula de comprobar la reducción será una «prueba escrita» de los producido hace un año frente a lo producido en ese periodo en el que existe compromiso de esa bajada. Por lo que se refiere al pago este se haría 45 días después del cierre del primer periodo de referencia, asegura Santalla, por lo que esta ayuda podría estar cobrada entre enero y febrero de 2017.
La propuesta realizada hoy desde UPA al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente es que esta ayuda se destine «a aquellas explotaciones que ya se encuentre próximas a la jubilación y que no vean posibilidades de seguir con la producción»
Pago Acoplado de la PAC
Además, la Comisión Europea ha planteado la posibilidad de llevar a cabo algunos cambios en el pago asociado de la PAC con el que cuenta el sector del vacuno de leche. «Se está consultado a los Estados Miembros, asegura el responsable de UPA, una modificación trascendente pues si hasta la fecha se controlaba trimestralmente la presencia de las vacas en la explotación, ahora la propuesta para 2017 es, de forma temporal, desacoplar esa ayuda y que se pueda cobrar teniendo en cuenta lo percibido en 2016 aunque en la PAC de 2017 ya no se tenga animales en la explotación»
