Con la premisa de mostrar “lo mucho y lo bueno” que tiene el campo de Castilla y León, las organizaciones agrarias de la comunidad, las cooperativas los partidos de la oposición y la Consejería de Agricultura han firmado el documento con el que se presenta la postura común que ofrecerá el ejecutivo autonómico de cara a la negociación que desde ahora y hasta finales de 2020 se discutirá en Bruselas.
Tres semanas de trabajo para defender y garantizar la sostenibilidad del sector primario que tal y como recordaba la consejera de agricultura está en manos de los jóvenes para quien ha pedido un mayor protagonismo, además de a los ATPs y las mujeres del mundo rural. El otro objetivo, mantener las cuantías: “Es un principio fundamental, que al menos se mantenga la cuantía que hay en estos momentos” ha expresado Milagros Marcos rechazando por tanto cualquier renacionalización de las cuentas.
A ello ha respondido Donaciano Dujo asegurando que “nunca se pueda hacer transacciones comerciales por debajo de los costes de producción” punto que han apoyado desde Urcacyl esperando que “no regateen aquello que pedimos tanto” tal y como ha recordado Jesús Carrión. El documento que ha destacado por la pluralidad“ de partidos políticos que lo apoyan (todos los grupos parlamentarios en las Cortes) que reclaman los mismos deberes para todos los estados en materias como la sanitaria o la medioambiental cuando importen determinados productos.
Dos fases de negociación
El documento, previa firma de todos los integrantes, ha sido remitido al gobierno central para que pueda ser defendido en todas las mesas sectoriales. Además, podrá ser respaldado por cualquier otra formación política o movimiento u organización social de Castilla y León o cualquier otra provincia española como muestra de apoyo y fuerza antes de ser enviado a Bruselas.
Allí, solo faltará el “consenso en detalle” una vez llegue el documento al Parlamento Europeo tras lo cual se debatirá y se discutirá con las otras comunidades autonómas y otros estados miembros: “El campo es parte de la solución contra el cambio climático o la conservación del medio ambiente” zanjaba Marcos. Ahora solo queda la respuesta de Bruselas.
