Un reciente informe elaborado por la cooperativa ACOR, partiendo de datos oficiales ofrecidos por la Consejería de Agricultura y Ganadería, muestra como el número de agricultores que se dedican al cultivo de la remolacha en Castilla y León, aquellos que perciben la ayuda asociada específica, se ha reducido en un 43,7% desde el año 2011 a la actualidad, pasando de las 5.874 iniciales a los 3.305 actuales.
Cuantitativamente, los mayores descensos los viven Valladolid y León, la primera pierde, en esos siete años, 654 profesionales hasta los 890 actuales y la provincia leonesa ve como el número de remolacheros cae en 591 situándose a 734.
Porcentualmente, el descenso más fuerte lo vive Zamora con una bajada del 52,6% al perder 652 contando en la actualidad con 309.
Señalar que, sólo en el último año, han abandonado la actividad 320 remolacheros, buena parte de ellos en Valladolid con 112 menos al pasar desde 1.002 a 890. Destacar aquí, que Palencia gana 34 profesionales subiendo desde 311 a 345
SUPERFICIE
Por lo que se refiere a las hectáreas dedicadas a esta raíz en Castilla y León, indicar que, en el último año, la superficie ha caído un 5,7% desde las 26.083 a las 24.588 de 2018.
Tres provincias, a pesar de la tónica general, viven subidas así Burgos pasa de 1.818 a 1.989, Palencia asciende un 12% ganando 222 hectáreas al incrementarse desde 1.761 hasta 1.983 y, finalmente, en Soria se aprecia un aumento del 5% al llegar hasta las 243 hectáreas.
Zamora es la provincia que más superficie pierde, en el último año, con un 13,8% menos de hectáreas, bajando em 359 hasta las 2.235 registradas en la actualidad; un 8,5% pierde Valladolid, con 677 hectáreas menos hasta las 7.325 y un 7,8% descienden en León, sembrándose 489 hectáreas menos que en la campaña previa alcanzando 5.796 hectáreas
En cuanto a los datos desde el año 2011, se aprecia una reducción de la superficie del 22% la disminuir desde las 31.590 a las 24.588 hectáreas sembradas en 2018.
Aquí la mayor reducción la vive Palencia que ha perdido el 46% de sus hectáreas de remolacha cayendo desde 3.680 a 1.982. Cuantitativamente el peor dato lo ofrece Valladolid con una perdida de superficie de 2.000 descendiendo hasta las 7.325 has.
Un aspecto muy interesante a tener en cuenta son los datos ofrecidos, en diferentes foros, por ACOR referidos a la superficie contratada, de tal forma que de las 7.431 hectáreas de 2016, se pasó a 10.155 en 2017 y 10.269 en 2018, lo que significa un ascenso de 2.838 hectáreas. Mientras, en ese mismo periodo de tiempo, en Castilla y León el incremento ha sido “sólo” de 1.790 al pasar de 22.818 hectáreas a 22.818, lo que evidencia el claro trasvase de superficie que se está produciendo en los últimos años entre las dos empresas que operan en este mercado en la actualidad.
HECTÁREAS POR EXPLOTACION
Una cifra interesante se refiere a las hectáreas que cada remolachero dedica en su explotación, dato que ha crecido un 38% entre 2011 y 2017 pasando de 5,38 hectáreas a las 7,44 registradas en 2018.
Salamanca, Valladolid y León son las que cuentan con explotaciones más grandes con una media de 9,37, 8,23 y 7,90 hectáreas.
Los mayores incrementos en los últimos siete años los ha vivido Salamanca, donde el aumento es del 54% desde las 6 hectáreas iniciales, seguida de León donde el ascenso es del 53% desde las 5,14 hectáreas de 2011 a las ya referidas 7,90 actuales.
Aunque son muchas las voces que valoran de forma positiva ese redimensionamiento de la explotación, todavía se considera insuficiente para avanzar en la mejora de la rentabilidad por lo que es necesario seguir aumentando hasta rondar las 10 hectáreas
