La Organización agraria COAG acaba de publicar su IPOD, Indice de Precios de Origen y Destino, en la que se aprecia como los productos agrarios multiplican, como media, por más de cuatro su precio desde el agricultor al ganadero hasta que llega al consumidor.
Asi, por ejemplo, la patata pasa de los 0,20 euros por kilo que cobra el ganadero a los 0,73 euros que abona el consumidor, lo que representa un crecimiento del 265 por ciento. La ternera de primera un 311 por cienro, el cordero un 253 por cierto, desde 2,99 euros a los 10,54 euros por kilo que se encuentra en los viales, el cerdo un 291 por ciento, el conejo lo hace un 192 por ciento pues el ganadero percibe 1,79 euros por cada kilo de conejo que lleva al matadero mientras el consumidor paga 5,22.
Para finalizar destacar la zanahoría que multiplica su valor un 213 por ciento desde el origen al destino.
