Esta es una de las preguntas que se hace el agricultor estos días y ya solo el plantearse esta pregunta nos puede hacer pensar y reflexionar sobre que está cambiando en el mundo de la fertilización.
En la toma de decisiones que hace un agricultor estos días, está haciendo las mejores labores para preparar el suelo, o ha hecho una buena rotación para poder hacer una siembra directa en condiciones, compro la mejor maquinaria posible para hacerlo, ha buscado las semillas que mejor se adaptan a su terreno, ha seleccionado esa semilla, escoge el mejor momento para sembrar y otro sin fin de decisiones y ninguna de ellas ha decidido reducirla o eliminarla, entonces porque se hace con la fertilización.
Pero además es una situación que ya viene arrastrándose varios años, ya son como mínimo dos campañas en el que la fertilización de fondo, la que tiene que ayudar a la implantación de los cultivos y darles fuerza y energía, se ha eliminado por muchos agricultores y ya hay otros que llevan muchos años de eliminación por los llamados abonos de “única aplicación”.
Una de las justificaciones es que elimine la fertilización o la cambie por una sola aplicación y cojo igual que los demás, y de esto se está realmente ¿seguro?, el resultado agronómico es único de cada parcela, es decir si no lo comparas nunca se sabrá si se ha podido coger más o menos en función de la decisión tomada.
Otra de las justificaciones es que los precios de los abonos son muy caros y no se pueden asumir en la explotación agrícola. Los precios de los abonos estos últimos años están siendo más caros de lo habitual por las circunstancias internacionales que todos ya conocen, al igual que ocurre con el precio de las cosechas obtenidas que están por encima de las medias de los precios históricos para estos cereales u oleaginosas.
Si se hacen bien las cuentas y se fertiliza en función del análisis de suelo y del potencial productivo real de la zona, la fertilización es la decisión más rentable que se puede tomar, ya que su función es la de sumar producción y calidad de cosecha.
La fertilización es una inversión, puesto que también nos va a permitir mantener el suelo, las tierras, con una fertilidad adecuada sin esquilmar sus recursos.
En estos años Fertiberia ha diseñado y fabricado abonos con más eficacia por unidad de nutriente con la gama SulfActive abonos que garantizan la alimentación del cultivo implantado y el mantenimiento de la fertilidad del suelo y con una gama de equilibrios que se adaptan a la realidad de cada suelo y de cada agricultor siendo mucho más eficientes y rentables.
