Se prevé que la producción mundial de carne de cerdo alcance los 114,8 millones de toneladas en 2023 según los datos ofrecidos por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos que recoger la consultora AHDB , ya que la producción crecerá en China, Canadá y Brasil, compensando las disminuciones en la UE, México y Filipinas.
La producción china está en alza con un sacrificio mayor a la esperada, ya que los productores buscan reducir el tamaño del rebaño y mantener un flujo de ganancias.
La producción de carne de cerdo de Brasil se ha revisado al alza un 8 % desde el pronóstico anterior a 1,5 millones de toneladas a medida que caen los precios de los piensos y la fuerte demanda de los mercados asiáticos incentiva la producción.
Se espera que la producción en Filipinas caiga debido al resurgimiento de la Peste Porcina Africana en áreas productoras clave, un 3% menos que el pronóstico anterior.
Las exportaciones globales se pronostican en 10,8 millones de toneladas, con mayores envíos de EE. UU. y Brasil, que pueden beneficiarse de las exportaciones reducidas de la UE y Canadá, lo que permite ganancias en la participación de mercado en Corea del Sur, Filipinas y China.
En la UE, la producción de carne de cerdo ha experimentado grandes caídas en la capacidad en lo que va del año , y se prevé que finalice el año un 5,5 % por debajo de los volúmenes de 2022, según las últimas perspectivas a corto plazo de la UE . Esto se debe, aseguran desde AHDB, a la contracción del censo de hembras reproductoras, los altos costos de alimentación y la amenaza cada vez mayor de la peste porcina africana. Los precios del cerdo han alcanzado máximos históricos, un 30% más que en junio de 2022, a medida que se reducen los suministros. La demanda interna de carne de cerdo en la UE sigue siendo alta, pero es probable que caiga un 4,5 % hasta los 30,4 kg por persona y año, ya que la oferta no puede satisfacer la demanda y los altos precios alejan a los clientes de la carne de cerdo, cambiando a carnes más baratas, como las aves, o reduciendo el consumo de carne.
Una caída en la capacidad de producción interna en la UE ha llevado a una reducción en las exportaciones, que se prevé que finalicen el año un 12% menos que en 2022. Debido a los altos precios internos, se han visto pérdidas en mercados de alto valor como EE. UU. y Australia, y menores valor como Filipinas, con nuevas caídas de las exportaciones a China, como resultado de la falta de competitividad de los precios.
