“El ataque” artículo de Ángel Cuaresma para su blog en AgroNews
El ataque de la dictadura iraní contra Israel coincide en el tiempo con la inoportuna gira de Sánchez para extender por el mundo su inoportuna propuesta de creación de un inoportuno estado palestino. La vieja ocurrencia, que hoy predica el presidente del Gobierno de España, es evidente que no es sólo suya, aunque sí su impericia y falta de solidez, y cojea por todos los lados al tiempo que deja abiertos muchos frentes en plena escalada bélica.
La creación de un estado palestino no es algo de hoy, se remonta a décadas tras el holocausto judío de los años 30 y 40 y la decisión de los organismos internacionales de asentar al pueblo perseguido, el de Israel, no el palestino, en su tierra de origen. Hoy, insisto, décadas después, las cosas han cambiado sobremanera, Israel se ha asentado, a base de esfuerzo, estudio y trabajo, como una de las democracias de referencia del mundo occidental, líder en investigación tecnológica y avances agrícolas (ya que estamos en Agronews) con unos envidiables parámetros macro y microeconómicos.
Frente a esta democracia, con sus imperfecciones, por supuesto, derivadas de cierto tufillo ortodoxo, todo lo que le rodea, en el más amplio sentido de la palabra, se traduce en muerte, destrucción de las libertades, desigualdad entre clases y entre sexos y, sobre todo, terror, mucho, mucho dinero, al servicio de las organizaciones terroristas más sanguinarias del momento.
“El ataque”
Teocracias discretas, es decir, esas que las matan callando, como Egipto o el Líbano, conviven en estrecha alianza con los mayores enemigos de la humanidad, Irán y Siria, y, en medio, esa Palestina atenazada no por Israel sino por una mal llamada Autoridad nacional Palestina, que no es ni autoridad, ni nacional, ni Palestina, sino un títere de Hamás, Hizbolá y Al Qaeda, encargadas, por designación divina. de masacrar a una población a la que la guerra presente está dando la quién sabe si última estocada.
En este escenario, ¿qué supuesto estado palestino pretendemos? Conociendo a Sánchez y sus socios, mucho me temo que uno en el que las mujeres lleven burka o hiyab, en el que las adúlteras (sólo las mujeres, por supuesto) sean lapidadas y los homosexuales ahorcados.
La llamada internacionalización del conflicto no puede tener otra salida que el apoyo decidido de la sociedad occidental a Israel, apoyo del que el pueblo palestino será el primer beneficiado si logramos que la guerra concluya cuanto antes y, por supuesto, con la victoria de la única democracia de la región.
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